Después de mucho tiempo esperándola, llego. La primavera es una de las épocas más idóneas para capturar el color, la belleza, la naturalidad y la frescura de la madre naturaleza. No importa que se trate de un paisaje, de unos animales, de un grupo de personas o del color y la ternura de las aguas de un río, la primavera es el momento perfecto para capturar e inmortalizar ese agradable olor, ese toque de color llamativo y toda esa paz y tranquilidad que desprende.

 El equipo que llevarás 

Lo primero que debes tener en cuenta es el equipo que vas a llevar a la sesión. Lo recomendable es que te cargues con una buena cámara réflex, con un juego de lentes y objetivos diferentes como macros para las fotografías de flores y objetivos zoom para tomar imágenes de animales.

 Si no dispones de una cámara réflex pero, aun así, te apasiona la fotografía, no te preocupes. Con tu pequeña cámara compacta o con una bridge puedes tomar imágenes igual de impresionantes que con una cámara profesional (te lo digo por experiencia).

 Cierra el diafragma 

Cuando tomas imágenes de paisajes es necesario que cierres el diafragma lo máximo posible, con un F16 bastará. De esa forma obtendrás toda la imagen nítida y no perderás calidad.

Seguro que en este momento estás pensando ¿Si utilizo un diafragma tan cerrado, no me saldrán las fotos subexpuestas? Lo cierto es que no ya que al usarlos te puedes dar el lujo de tener tiempos de exposición un poco más largos o lo que es lo mismo, de mantener una velocidad más lenta mientras tomas la captura.

El trípode 

El trípode es fundamental en cualquier sesión. Si bien es cierto que con un diafragma tan cerrado no es necesario mantener la cámara fotográfica fijada a este aparato, también es cierto que, para disfrutar de una exposición más larga, sí que es recomendable.

Si no tienes un trípode no te preocupes, también puedes utilizar alguna piedra o la arma de un árbol para apoyar la cámara, abrir un poco más el diafragma o, en su defecto, aumentar la sensibilidad ISO pero ten en cuenta que éste último puede, además, producir ruido en la captura.

La regla de los tercios 

La regla de los tercios es una de las formas más interesantes de sacar buenas imágenes. Utiliza este sistema de fotografía para llamar la atención hacía un árbol, un animal o una zona del paisaje.

Cuidado con el fondo 

En todas las fotografías el fondo es importante pero en las imágenes de paisajes aún lo es más. Antes de ponerte a capturar imágenes debes seleccionar el punto de interés y examinar sus posibles ángulos. De esa forma evitarás tirar muchas imágenes a la basura. Recuerda, además, que el horizonte debe estar bien recto ya que si no la toma perderá mucha calidad.

Utiliza el cielo 

El cielo es otro de los puntos más interesantes de la fotografía. En épocas primaverales éste suele presentar un color uniforme y muy azulado que contrasta y queda perfecto con las nueves blancas que lo atraviesan. En estos casos puedes utilizarlo para darle fuerza y vida a la fotografía. En caso en el que el cielo esté
totalmente blanco o cubierto por una capa de nubes, algo que no queda del todo bien en una imagen primaveral, puedes optar por reducir su importancia y tan sólo dejarle un terco de la fotografía.

Pon un poco de drama con el movimiento 

La naturaleza se mueve, ya sea por el aire, por el movimiento de las olas, del agua de los ríos, de los animales o por cualquier causa, todas las piezas presentes en los pasajes emiten un movimiento que, plasmado a la perfección, pueden provocar un toque de dramatismo.

Utiliza velocidades bajas para tomar el movimiento de las aguas de un rio o los suaves toques de los arboles al chocarse con la suave brisa.


¿Tienes algún consejo más?

Si conoces más trucos y tienes consejos que puedan ayudar a otras personas a aprender y a disfrutar de la fotografía, no lo dudes. Envíanos un email con tus consejos, tus imágenes y todos tus trucos y los postearemos enseguida pero, además, pondremos las referencias, el nombre o los datos que quieras ya que ¡el trabajo es tuyo!